lunes, 15 de septiembre de 2025

DUCENTÉSIMA SEXTA TARDE

19:13 

Fuimos de una tienda a otra. Me preguntó cuánto me interesaba. Contesté, más bien mucho, son como salas de exposición; exponen ropas, zapatos, bolsos, cinturones, pañuelos, collares; exponen el arte de lo cotidiano.  

19:15 

Con los sentidos despiertos, paseamos a la buena de Dios entre los expositores. Resultaba relativamente fácil dejarse llevar por la tentación. 

19:16

He visto sombreros bajo cuyas alas se siente la elegancia. Y no esas gorras de vendedor de helados o de perritos calientes o de piloto de fórmula 1 con las que es difícil atreverse a sobrepasar las fronteras del infinito. Con esas gorras sólo puedes quedarte dentro de los límites de un paraíso pagano. 

19:19 

Polifemo nunca llevaría una de esas gorras, señalé en la vitrina. No conozco a ese señor, no sabría decirle, contestó el dependiente.